Seguidores

jueves, 25 de julio de 2013

ESTE JUEVES, UN RELATO: EL BOSQUE



Imaginemos por un momento, que nos encontramos de improviso en un bosque.
Chico, grande, no importa cómo. Simplemente, un bosque, con todo lo que encierra en su interior y que de hecho, no conocemos.
Nos preguntamos: ¿qué habrá en él?
Con la ayuda del tiempo, que irá pasando, lo sabremos, de a poco, paso a paso, minuto a minuto, y de esa forma lo iremos conociendo. Nos llevará mucho tiempo, tal vez, entender y aprender sus secretos, cómo es su interior, aún en lo más espeso y tupido que sea su follaje, y de a poco podremos hasta orientarnos y conocer y elegir el lugar que más nos convenga para planificar los pasos a seguir en un futuro incierto.
En este tipo de meditaciones que realizaremos se nos ocurre pensar en lo que puede pasarnos con nuestra vida a vivir en un futuro.
Volvemos a pensar en ese bosque desconocido que se asemeja a esta vida –la nuestra- tan incierta que no nos promete ningún tipo de seguridad.
¿Qué tenemos? –nos preguntamos- ¿Qué nos depara esta vida? ¿Alguien sabe de ese futuro? No, nadie lo sabe. Puede ser breve o no, grato o amargo, pero pensamos otra vez en ese misterioso bosque que recordamos.
Nos queda el deseo de pensar y esperar que los días venideros puedan transcurrir con la mejor y mayor paz y no nos sintamos prisioneros de esa maraña impenetrable que nos asusta.
Sólo pedimos que ese mañana que soñamos sea todo lo grato que pueda ser.

Más relatos, en lo de Judith

miércoles, 17 de julio de 2013

ESTE JUEVES UN RELATO: EL POZO DE LOS DESEOS



Según se comenta, hay en algún lugar del mundo, un sitio donde va todo aquel que tiene un deseo que pedir pero allí van también todos los que están dispuestos a dar algo de sí. Se produce así un verdadero intercambio que casi siempre se equilibra.
Se le conoce -así, simplemente- como el Pozo de los Deseos.
De acuerdo a lo que cuentan, es enorme, y es imposible calcular la capacidad que tiene para guardar tanto.
Por mucho tiempo que pase nunca está colmado, siempre por una “magia especial” queda un lugar vacío, disponible para un nuevo deseo que aparezca de improviso.
Si se observa bien, se puede apreciar que a ese Pozo famoso concurren dos tipos de personas, los que siempre piden algo para sí, y los que tratan de dejar algo de lo bueno que tienen para que puedan pedir los demás.
El desfile es incesante pero últimamente pasa algo curioso. Los que piden algo bueno pero a la vez son generosos, son pocos, en cambio los que piden algo sin dejar nada, son la mayoría.
Notamos entonces que lo bueno que allí se acumula disminuye cada vez más y se corre el peligro que desaparezca.
Nos preguntamos ¿por qué razón la gente no lo advierte? no toma conciencia del peligro que se corre cuando solamente se quita y no se aporta.
Llegará un momento en que podremos ver lo que quedó de aquel intercambio ideal.
Si nadie fue aportando eso bueno que se acumulaba si la gente no devuelve con generosidad, llegará un momento en que todo aquello bueno que contenía el Pozo se acabará para siempre. ¿Me pregunto cuándo será?

Más relatos, en lo de San

jueves, 11 de julio de 2013

ESTE JUEVES, UN RELATO: HISTORIAS DETRÁS DE LAS PINCELADAS

Muchachas al piano - Renoir

Es sabido que nuestro tiempo de vivir habrá de llevarnos por senderos diversos que de momento, son desconocidos. Cuando nacemos, traemos con nosotros un destino ignorado que vamos conociendo de apoco a medida que crecemos.
Los días al transcurrir, van sucediéndose uno tras otro en miles de situaciones diversas, gratas tal vez, o quizás tristes por momentos, que conoceremos cuando se vayan `presentando, ya que nadie puede saber de antemano ese futuro que habrá de llegar –si llega-
Es un camino largo para recorrer que por momentos nos producirán una forma de cansancio que nos habrá de acompañar en los malos momentos. También habrá otros –gratos, por suerte- y en nuestro diario vivir aprenderemos a equilibrar todas las situaciones que se presenten y de esa forma iremos razonando y distinguiendo, mejorando nuestro desempeño para poder valorizar lo que tenemos a diario. Y entre tantas experiencias nos encontraremos, de improviso –quizás- con alguna obra de arte que nos deslumbre. Yo pude ver, en este caso, algo que dejó en mí su sello especial, una pintura famosa de Renoir –Muchachas al piano- y sentí de golpe, al verlo, una emoción intensa.
Encontré en ella una pintura sencilla, suave, tierna, pero tan expresiva que transmite a quien al mira –al menos a mí- cierta paz que resulta la viva muestra de la inocencia en las vidas de estos personajes, la gracia natural de quienes, con calma, tratan de estudiar y comprender tal o cual tema o situación difícil. Sin estridencias, muestra, define y nos lleva a disfrutar con serenidad tanto el ambiente como los personajes.  Si alguien me preguntara qué le falta, diría que el sonido musical…que no se escucha, pero está. Sólo eso.

Más historias y pinceladas, aquí.

jueves, 4 de julio de 2013

ESTE JUEVES, UN RELATO: INDEPENDENCIA PERSONAL


Es muy común escuchar opiniones que obedecen exclusivamente a intereses mezquinos.
-“si me conviene tal o cual cosa, opino a favor”- ese es el comentario de muchos.
Lamentablemente notamos cómo se ha ido incorporando esa manera de actuar buscando arrastrarnos hacia la enorme caravana con que la mayoría se maneja o se inspira. Los grandes ideales no existen, y vemos que las ideas que circulan obedecen a pobres pensamientos de gente que no razona por sí sola, sino que sólo copia lo que hacen o dicen los demás.
No se piensa que cada uno tiene el derecho de opinar y elegir. Se vive creyendo que la independencia personal, es un error y se supone que siempre hay un riesgo al manifestar una idea distinta, creyendo que la razón está donde la mayoría decide.
Y no es así. No nos damos cuenta que la verdad no está en la estridencia de quien quiere imponerla por la fuerza, ignorando que muchas veces puede estar en el más leve de los murmullos.
La independencia de pensamientos que toda persona tiene por derecho, debe ser defendida, apelando a educar con respeto para que nadie pueda sentirse ofendido o molesto porque su punto de vista sea distinto que el de la mayoría.

Aprobar algo sin saber por qué, sólo porque los otros así lo creen, es un error. Disentir con los demás y buscar que comprendan nuestro punto de vista no debe ser considerado un pecado. Nuestro pensamiento nos pertenece y nadie puede pretender que lo cambiemos sólo porque nos lo ordenan.


Más textos independentistas, en lo de Leonor