Entre tantas cosas que
quisiéramos conseguir en nuestro diario
vivir, hay una que resulta ser de las más difíciles de encontrar, de esas
que más se buscan, a veces con éxito, a veces -o muchas- sin ella; el poder
encontrarla de por sí, es tarea harto difícil.
Si esa búsqueda no
nos da el resultado que necesitamos y que tanto valor tiene nos permite
comprobar -lamentablemente- que su ausencia nos deprime. Sentimos que algo nos
falta.
La lista de “eso”
que tanto buscamos puede llegar a ser enorme. Para poder conseguirlo, muchas
veces, no nos alcanza el tiempo para justificar cuál es la necesidad de tenerlo
y cuánto nos duele cuando no podemos conseguirlo.
Nos encontramos en
la vida buscando con avidez fortuna, suerte, bienestar, salud, etc. La lista
podría seguir infinitamente, pero a pesar de ello, nos cuesta ser los dueños de
ese “algo” que suponemos es fácil tenerlo, pero que tanto cuesta conseguir.
Si se nos
preguntara que definiéramos eso que tanto valoramos y buscamos, bastarían unas
pocas palabras - muy pocas- pero que tanto dicen para sintetizarlo.
Serían qué es para
nosotros qué es una amistad especial. Podemos resumirla con rapidez y total
seguridad:
“quien tiene un
amigo, sabe y siente lo que es ser uno mismo con la piel del otro”
Conseguirlo y
sentirlo a nuestro lado en todo momento, nos llena de alegría y satisfacción,
es entonces que nos damos cuenta que ya no estamos solos. Ya somos dos. Y con
eso basta ¿para qué más?
Más relatos sobre amistades, en lo de San
Lo has explicado muy bien y... como tú dices ?para que más?
ResponderEliminarMuy cierto lo que escribes... estoy realmente agradecida por los maravillosos amigos que tengo
ResponderEliminarNo es fácil contar con verdaderos amigos, como tampoco es fácil serlo para otros, pero cuando se produce ese encuentro, realmente es como dices, es ser uno en la piel del otro. Somos afortunados si en nuestra vida contamos con el amor de los amigos. Siempre bienvenidas tus reflexiones Eduardo.
ResponderEliminarMuchas gracias por acompañarme este jueves.
Un abrazo.
Dicen que los amigos de verdad se cuentan con los dedos de una mano y a veces sobra. Pero, llevas razón ¿para que más? Con esos es suficiente. Más vale calidad que cantidad. Besos.
ResponderEliminarDice el dicho: "Quien tiene un amigo, tiene un tesoro" Con uno ya estaría bien, el mundo no va sobrado de tesoros.
ResponderEliminarAbrazos y Feliz Navidad
Cierto es que la vida sin amistad sería sumamente desolada. No solo porque nos haría falta con quién hablar, con quién compartir, a quien brindarle apoyo y afecto, sino que eso es recíproco, y por lo tanto, tanto dar como recibir, es una necesidad que tenemos como personas.
ResponderEliminarSiempre muy interesantes tus reflexiones de vida!
Besos!
Gaby*
(Acorde a la frase a la que hace mención Alfredo, me vino a la mente otra -en tono de chiste- que dice que "el que tiene un tesoro, tiene muchos amigos". Claro que no son esos los que necesitamos precisamente!)
No creo que exista nada peor que carecer de amigos. Has descrito con la claridad de ideas que te distingue, el vacío tan enorme que sufre el que no los tiene.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Eduardo y Feliz Navidad.